Más de 40 personas en la misa ante los restos del P. Lerchundi

 

El pasado viernes, 8 de marzo, coincidiendo con el 128 aniversario del fallecimiento del P. José María Lerchundi y con motivo del inicio de la apertura de su proceso de canonización, se celebró una eucaristía en la cripta de la catedral, donde se encuentra su sepulcro, con la presencia de una cuarentena de asistentes.

¿Cómo nace esta iniciativa? Fr. Natale Fiumanò, ofm, párroco de la Catedral del Espíritu Santo, nos lo explica así: «Al saber que Fr. Emilio Rocha, ofm, arzobispo de Tánger, había propuesto la apertura de la causa de beatificación del P. José María Lerchundi, pensé que para la comunidad parroquial era toda una gracia custodiar su tumba en nuestra templo. De aquí nace la idea de conocer mejor su vida y sus obras en esta tierra marroquí que nos acoge. El día del aniversario de su muerte, siendo un viernes de cuaresma, rezamos el viacrucis, con meditaciones extraídas de escritos del P. Lerchundi y a continuación se celebró la misa en la cripta, ante su tumba».

En el momento de la homilía, Fr. Emilio, que presidía la celebración, realizó una semblanza biográfica sobre el P. Lerchundi, con el deseo de continuar profundizando paulatinamente la personalidad apasionante de una de las personas que han marcado la vida de la Iglesia y la sociedad marroquí a lo largo de buena parte del siglo XIX.

A partir de ahora, el día 8 de cada mes se invita a la comunidad cristiana a bajar a la cripta para celebrar la eucaristía en este lugar y para «acercarnos cada vez más al P. Lerchundi, que puede ayudarnos a vivir como discípulos de Cristo entre y con los musulmanes», explica Fr. Natale.

 

La mujer, al centro de su desarrollo personal

Algunas voluntarias, profesoras y usuarias del Centro de la Mujer Ntra. Sra. de Marruecos

Al amparo del Centro Lerchundi de Martil ha nacido el Centro de la Mujer Nuestra Señora de Marruecos, que busca lograr una acción transformadora en la que las mujeres puedan ser protagonistas de su cambio en los ámbitos educativo, laboral y social.

Este proyecto cuenta con el apoyo de Manos Unidas, que lo sostiene en este 2024, dado su enfoque de promoción integral de las personas. Cabe decir también que el Centro de la Mujer Ntra. Sra. De Marruecos es heredero de la acción social que durante décadas habían realizado las religiosas Franciscanas Misioneras de María con la escuela de costura que existió en las dependencias de la antigua iglesia de Martil.

En este año, se retoma esta experiencia de servicio a la sociedad marroquí, inspirada en los valores evangélicos, ampliando su impacto: las mujeres beneficiarias no sólo van a recibir una formación profesional de corte, confección y labores sino también en otros ámbitos como el de alfabetización, conocimientos digitales y empoderamiento personal, y con un componente importante de orientación e inserción laboral.

Actividades interculturales sobre la situación de la mujer en el mundo
Con motivo de la inauguración del Centro de la Mujer Ntra. Sra. De Marruecos, el Centro Lerchundi de Martil acoge una serie de actividades en los próximos días que pondrán el foco en la situación de la mujer, especialmente en África y Marruecos.

El Día de la Mujer, 8 de marzo, a las 14h, en la Biblioteca Padre Lerchundi se realizará la mesa redonda «La lucha contra las violencias hacia las mujeres», en colaboración con el Consejo Nacional de Migrantes.
Por la tarde, a las 19h, tendrá lugar la proyección de la película “En el tiempo de las mariposas” (Estados Unidos-México, 2001) y el posterior cineforum.

El domingo 10 de marzo, en colaboración con la comunidad de estudiantes gaboneses de Tetuán/Tánger, se organiza una jornada intercultural, con la mesa redonda “La igualdad de género en el mundo” a las 14h, con la intervención de estudiantes marroquíes, subsaharianas, europeas y latinoamericanas. A continuación, espacio de confraternización, con música, canciones, merienda, desfile tradicional y moderno.

Misa en recuerdo al P. Lerchundi ante su tumba

El viernes 8 de marzo, coincidiendo con el aniversario de la muerte del P. Lerchundi, ofm, se celebrará a las 18.30h la eucaristía en la cripta de la catedral de Tánger. A partir de ese momento, cada día 8 de mes, se celebrará la misa ante los restos mortales del P. Lerchundi, como ocasión de conocer más y de difundir la figura y el legado de este fraile franciscano, nacido en Orio (Guipúzcoa/España) el 24 de febrero de 1836 y fallecido en Tánger el 8 de marzo de 1896.

En palabras de Fr. Emilio Rocha, ofm, arzobispo de Tánger, “es, sin duda, el misionero más egregio que tuvo la Misión desde su restauración en 1859”. Al P. Lerchundi se debió la erección de escuelas que acogían europeos y marroquíes; la creación de centros de estudio de árabe; la imprenta hispano-arábiga de la Misión en Tánger, así como, entre otros elementos en esta ciudad, la creación del barrio popular de “Casas Baratas” o del Hospital Español; fundó, asimismo, el Colegio de Nuestra Señora de Regla en Chipiona (Cádiz), como seminario de franciscanos con destino a Tierra Santa y Marruecos. Como experto arabista, también fue destacado su papel de mediación diplomática entre las autoridades marroquíes, españolas y de la Santa Sede.

Tras haber estudiado detenidamente la cuestión, Fr. Emilio Rocha, ofm, ha decidido introducir la Causa de Beatificación del P. Lerchundi, que fue misionero y primer Prefecto Apostólico de Marruecos en el siglo XIX.

Jóvenes y cuaresma: tiempo de gracia, de compartir y de conversión

¡Qué bueno es que los hermanos vivamos en unidad, qué bueno es ver un universo de jóvenes abriéndose cada vez más y despertando cada día!
Así se expresa Paulina, participante en el retiro cuaresmal para jóvenes realizado en la casa de las Religiosas Adoratrices, en Tánger, el pasado domingo día 3 de marzo. Fue organizado por la Comisión diocesana de familia y juventud y la Capellanía de los estudiantes católicos (AECAM) y participaron más de 60 jóvenes procedentes de la ciudad.

Para Elmira, este retiro ha sido una oportunidad de encontrarnos en «nuestro desierto», es decir, lejos de nuestro entorno habitual, para meditar y experimentar la fraternidad. Nos ha ayudado a redescubrir la importancia de la esperanza y hemos encontrado nuevas motivaciones que nos impulsan a vivir mejor en este tiempo.

A Jean-Junior le ha gustado mucho el mensaje del Papa titulado “Alegres en la esperanza”, uno de los contenidos fuertes del retiro, cuya lectura fue intercalada con cantos. La idea de vivir gozosos en la esperanza todavía me recuerda el significado de mi bautismo, expresa Jean Junior, nacido en una familia interreligiosa, de padre musulmán y madre católica. Reconoce que nunca todo fue fácil pero gracias a la paciencia terminé encontrando mi camino.

A continuación, Fr. Thaddée Musas, de la Parroquia de la Asunción, expuso una reflexión sobre la cuaresma como tiempo de gracia, para compartir y convertirnos. Para Paulina, fueron palabras esperanzadores, que iban encendiendo un camino de luz, sin retorno a la oscuridad. Un tiempo posterior de meditación personal permitió ir en profundidad y dejar resonar cuanto el Espíritu sugería en el interior de cada joven presente, que tuvieron opción de recibir el sacramento de la reconciliación al final de la mañana.

La comida fue ocasión de construir y experimentar un espacio de fraternidad y compartición entre los jóvenes, los sacerdotes y religiosos, y con el arzobispo de Tánger, Fr. Emilio Rocha, ofm, en un clima de sencillez y cercanía. La mejor preparación a la eucaristía final en la que, alimentados con la Palabra de Dios y el Cuerpo de Jesús, los jóvenes pudieron rezar también por los enfermos y por todas sus inquietudes personales.

Al preguntar a Elmira, Junior y Paulina con qué palabras resumirían la experiencia de este retiro, han expresado estas ideas, que aquí plasmamos visualmente en esta “nube de palabras”.

Junior se expresa con estas palabras: Con el tiempo, aprecio y aprendo a nutrirme espiritualmente a través de otros hermanos y hermanas; con seguridad sé que aquel en quien he puesto mi esperanza nunca me dejará (1 Tes 4,14-18).

Elmira, además, se explicaba así: Aprendí que la esperanza debe ser parte de nuestra vida diaria. Ella nos anima y nos hace creer en un futuro mejor. El Amor de Dios es el que debemos cultivar durante este período; el mismo Amor que empujó a Cristo a la Cruz. Me he sentido en paz en este retiro, lejos del ruido, de las preocupaciones cotidianas, rodeados de otros… Ha sido un fabuloso momento fraterno.

Y Paulina nos dice: Doy gracias a Dios por darme esta oportunidad de vivir en un ambiente con personas dispuestas a ser cada vez mejores, hermanos de diferentes países unidos en una misma fe. Ha sido algo transformador, sentir a cada hermano más cerca de su propio estado natural.

Hay un nuevo retiro para los jóvenes de la diócesis, el próximo 17 de marzo, en Alhucemas. ¡No te lo pierdas!

 

 

 

 

 

Nueva directora de las Obras Misionales Pontificias en Marruecos

El Dicasterio para la Evangelización ha nombrado a la religiosa María Viader Alberich, rjm, nueva directora de las Obras Misionales pontificias (OMP) en Marruecos.
Las OMP son una red mundial al servicio del Papa para sostener la misión y a las jóvenes Iglesias con la oración y la caridad. Dependen, orgánicamente, del Dicasterio para la Evangelización de la Santa Sede. Al frente de las representaciones de OMP en cada país hay un director o directora nombrado por el Dicasterio, como es el caso ahora de María Viader Alberich, rjm, para Marruecos, responsabilidad que hasta ahora ejercía el franciscano Padre Szymon Stachera, ofm.

Con motivo de este nombramiento, conversamos con María Viader Alberich, que reside en Tánger. al servicio de la guardería infantil “Sagrado Corazón” y de la casa de acogida para niñas en situación de riesgo “Dar Tika”.

¿Qué valor tiene este nombramiento?
Para mí, sobre todo, estar al servicio de las misiones. Todo cristiano, por ser cristiano, ya es misionero. Jesús nos dice “id y proclamad el Evangelio” y tengo claro que hoy en día el Evangelio se puede anunciar de muchas maneras: a través del corazón, con las manos, con un abrazo, con un gesto… y cada uno desde la realidad donde está. Ahora bien, las Obras Misionales Pontificias, esta red universal de la Iglesia, hace real el acompañamiento, la cercanía, el apoyo espiritual y económico allí donde la Iglesia católica es más frágil.
Quiero destacar también unas palabras de agradecimiento al P. Simeón Stachera, el anterior director de OMP en Marruecos, por la labor desarrollada durante años, para hacer realidad el Reino de Dios aquí, en el servicio, junto a muchos otros hermanos nuestros.

¿Qué presencia tienen las OMP en Marruecos?
Podemos decir que somos un país receptor de ayuda por parte de las Obras Misionales Pontificias. También colaboramos un poco económicamente, pero sobre todo recibimos la ayuda, el apoyo y la oración de la Iglesia que reza por todos nosotros.
Nuestro contexto es el de un país mayoritariamente musulmán, y aquí me viene a la mente lo que decía San Francisco a sus frailes, cuando iban a países donde la religión católica no era la mayoritaria. Decía, aproximadamente, que predicaran el Evangelio, si fuese necesario también con palabras. Creo que en Marruecos, la proclamación del Evangelio se realiza, aunque con pocas palabras, a través de obras sociales, de la entrega a nuestros hermanos, de ayudar a la persona a crecer en su dignidad…

Tú eres religiosa de Jesús-María. ¿Qué significa, desde tu carisma, este servicio a OMP?
Algo muy especial. Trasladémonos al siglo XIX, a la ciudad de Lyon en la época posterior a la revolución francesa. Dos mujeres, muy amigas, ven la situación caótica de Francia, cuánta gente muerta, cuánto sufrimiento, cuánta pobreza… y experimentan la necesidad de ayudar a los demás y proclamar el Evangelio. Son Paulina María Jaricot y Claudina Thévenet, respectivamente fundadoras de la Asociación de Propagación de la Fe, semilla de las OMP, y de las Religiosas de Jesús-María, una congregación aprobada rápidamente en sus orígenes por su espíritu misionero. Como vemos, dos maneras de hacer realidad el Reino de Dios desde una dimensión misionera. Te puedes imaginar que para mí, hoy, asumir este servicio a las OMP, siendo religiosa de Jesús-María, es como aunar los carismas de estas dos grandes mujeres amigas.

¿Qué experiencia tienes en tierras de misión?
La verdad es que desde pequeñita sentí la llamada a la misión, a ir a otros países… incluso antes de la vocación al seguimiento de Jesús desde la vida consagrada.
En 1998, cuando hubo el huracán Mich en Honduras, estuve dos meses colaborando con unos sacerdotes en Tegucigalpa, en el barrio del Mogote. Fue una experiencia muy dura: las personas no tenían absolutamente nada y íbamos viendo cómo colaborar en talleres, levantando casas, creando huertos… Después, he estado diez años en Guinea Ecuatorial, en la ciudad de Malabo, donde me he dedicado especialmente a la dirección de un colegio, a la colaboración en un internado de niñas y a la promoción de la mujer. En esos años tuve la suerte también de conocer realidades de nuestra congregación en Nigeria, Gabón y Camerún. Ahora este es mi segundo año en Marruecos, en Tánger.
Descubro que, sí, son realidades distintas pero la humanidad es la misma, la persona es igual y tenemos todos las mismas necesidades, estemos en el país donde estemos. Se trata de una experiencia de conocer otras realidades y de aprender de ellas… Para entrar en las costumbres del otro hay que hacerlo a pie descalzo, conscientes de que a veces no es fácil, pero siempre con actitud de aprender de los otros y así se realiza un auténtico intercambio enriquecedor.

El camino cuaresmal, momento de oración

Las seis semanas de la cuaresma son un tiempo favorable para profundizar en la oración, para revitalizar la vida de fe de los creyentes y acoger con intensidad renovada los misterios de la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Por ello es un periodo en el que se multiplican las iniciativas de diversa índole, enfocadas a esta finalidad.

Las monjas contemplativas del Carmelo de Tánger ofrecen cada sábado de cuaresma un tiempo de adoración al Santísimo en la capilla de su convento, a las 16.30h.

En la Catedral del Espíritu Santo, en Tánger, cada viernes de cuaresma a las 18h se reza el vía crucis, que cada semana es conducido por una o varias comunidades religiosas presentes en la ciudad.
También en la Parroquia de San José, de Alhucemas, durante la cuaresma, los viernes se celebra la eucaristía a las 17.30h y el vía crucis a las 18h.

En cambio, en la Parroquia de Nuestra Señora de las Victorias, en Tetuán, el rezo del vía crucis se anticipa a la misa: a las 18.30h el viacrucis y a las 19h, como habitualmente, la eucaristía. Por otra parte, aquí se organiza un retiro cuaresmal para el sábado 24 de febrero a las 15h, con el título: “La cuaresma, tiempo de gracia, de compartir y de conversión”.

En Nador, el sábado 2 de marzo, de las 9h a las 13.30h, en la Parroquia de Santiago el Mayor, tendrá lugar el retiro “Contemplación de Jesús”, animado por el P. Damian Czerniack, sj. Y el tercer domingo de cuaresma, 3 de marzo, en Tánger tendrá lugar también un retiro cuaresmal, conducido por Fr. Thaddée Musas, ofm.

La comisión diocesana de Familia y Juventud convoca dos retiros para jóvenes, para llegar a las diversas zonas de la archidiócesis. El domingo día 3 de marzo, de las 10h a las 16h, en la ciudad de Tánger, concretamente en la casa de las religiosas adoratrices. En cambio, el 17 de marzo se realizará en Alhucemas.

Un paso decisivo de los catecúmenos

El primer domingo de cuaresma, día 18 de febrero, en el marco de la misa celebrada a las 10.30h en la Parroquia de la Asunción, en Tánger, nuestro arzobispo, Fr. Emilio Rocha, ofm, acogió a los jóvenes catecúmenos que en la próxima vigilia pascual recibirán el sacramento del Bautismo. El rito del domingo pasado en el camino del catecumenado que están siguiendo, significaba quedar inscritos en el Libro de los elegidos y también la unción prebautismal, momentos vividos en compañía de sus padrinos, sacerdotes y acompañantes en el cammino de formación.

Esta celebración fue la conclusión de un fin de semana de retiro de los jóvenes catecúmenos, para iniciar este etapa final de preparación más intensa, llamada purificación o iluminación, que coincide con la cuaresma. En ella, los elegidos o iluminados, son invitados a permanecer vigilantes, a orar, a purificarse y renovar sus corazones por la conversión.

Los jóvenes protagonistas de este momento han sido: Benoit, del Congo, y Abdoul Fatao, de Burkina Faso, procedentes de la parroquia de Tetuán; Izechiel, de Santo Tomé y Príncipe, y Buam, de Guinea-Bisáu, miembros de la Parroquia de la Asunción, de Tánger. ¡Enhorabuena a todos!

Tiempo de cuaresma, tiempo del Espíritu

El Miércoles de Ceniza da comienzo al tiempo litúrgico de la Cuaresma: son los 40 días que llevan hasta la Pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Este año el calendario litúrgico marca el comienzo de la Cuaresma el 14 de febrero.

¿Cómo vivir de manera renovada, como si fuera la primera cuaresma de nuestra vida, este periodo marcado por la conversión, la escucha de la Palabra de Dios, la oración, la limosna y el ayuno?

Para ayudarnos a ello, el papa Francisco ha escrito un mensaje para la Cuaresma 2024, titulado “A través del desierto Dios nos guía a la libertad” . En el texto, evoca en continuación la vivencia del Éxodo del Pueblo elegido y desde ahí, el Papa asegura que se trata de un “tiempo de conversión, tiempo de libertad” y explica que “el desierto es el espacio en el que nuestra libertad puede madurar en una decisión personal de no volver a caer en la esclavitud”.

Fray Emilio Rocha, ofm, arzobispo de Tánger, también ha escrito una carta para motivarnos a vivir intensamente este tiempo litúrgico, con el título “Tiempo de cuaresma, tiempo del Espíritu”. Con sus palabras, desmenuza los pasajes del mensaje del Papa, a partir de una reflexión personal. Una invitación a vivir este tiempo conversión que es un espacio simbólico de tránsito, no de permanencia, hacia la libertad.


En este 2024, en que el Ramadán inicia el 10 de marzo, coincidirán a partir de ese día durante casi tres semanas estos dos tiempos fuertes de conversión para los creyentes cristianos y los musulmanes.

Jornada Mundial del enfermo 2024: la medicina es la cercanía

«No conviene que el hombre esté solo». Cuidar al enfermo cuidando las relaciones. Este es el título del mensaje del papa Francisco con ocasión de la XXXII Jornada Mundial del Enfermo 2024, que la Iglesia celebra el 11 de febrero, memoria de la Santísima Virgen María de Lourdes.

Con esta referencia bíblica al libro del Génesis (Gn 2,18), el Santo Padre recuerda que «los cristianos estamos especialmente llamados a hacer nuestra la mirada compasiva de Jesús». Por eso, invita a cuidar «a quienes sufren y están solos, e incluso marginados y descartados. Con el amor recíproco que Cristo Señor nos da en la oración, sobre todo en la Eucaristía, sanemos las heridas de la soledad y del aislamiento. Cooperemos así a contrarrestar la cultura del individualismo, de la indiferencia, del descarte, y hagamos crecer la cultura de la ternura y de la compasión«. «Los enfermos, los frágiles, los pobres -señala el papa Francisco- están en el corazón de la Iglesia y deben estar también en el centro de nuestra atención humana y solicitud pastoral».

En la Archidiócesis de Tánger son numerosas las obras sociales que tienen por destinatarios los enfermos. La Iglesia en estas tierras, a través de sus religiosos y religiosas, lleva a cabo la obra de misericordia de “visitar a los enfermos” en sus múltiples facetas. Por ejemplo, los Franciscanos de la Cruz Blanca, presentes en Tánger y Alhucemas, atienden especialmente a enfermos de salud mental; las Franciscanas Misioneras del Corazón Inmaculado de María, ofrecen atención sanitaria en el Hospital italiano de Tánger; las Hijas de la Caridad se ocupan de enfermos y ancianos en Ksar El-Kebir, Tetuán y Alhucemas; las Franciscanas de la Inmaculada llevan adelante la escuela Effetah, para niños sordos.

Acojamos todos la invitación a hacer crecer la cultura de la ternura, de la compasión, de la cercanía y recemos de manera especial por todos los enfermos:

— Por la Iglesia: para que asumiendo su vocación maternal acoja en su seno a todos los que se sienten solos y haga presente el consuelo de Cristo. Oremos.

— Por nuestros hermanos enfermos: para que, experimentando el misterio del dolor, sientan también la presencia cercana y maternal de la Virgen. Oremos.

— Por todos los consagrados al servicio de los enfermos y mayores: para que su dedicación y entrega sea reflejo del rostro misericordioso del Padre para quien nos necesite. Oremos.

— Por nuestra comunidad cristiana, nuestra parroquia: para que se muestre siempre cercana a las necesidades de quienes padecen la tristeza sea un verdadero hogar de acogida, acompañamiento y servicio para ellas. Oremos.

Oración en solidaridad con las víctimas de la trata en Nador

Ayer día 8 de febrero, memoria litúrgica de santa Josefina Bakhita, se celebró también la X Jornada de oración y reflexión contra la trata de personas, bajo el lema “Caminando por la dignidad: escuchar, soñar, actuar”.
En la parroquia de Santiago el Mayor de Nador nos unimos a esta jornada con una oración comunitaria, en la que, a través de símbolos, textos y momentos de silencio, tratamos de abrir nuestros corazones a esa realidad sangrante que viven tantos hijos e hijas de Dios.
Pedimos al Señor, que guio a santa Josefina Bakhita de la esclavitud a la libertad, que nos haga más solidarios con el sufrimiento de tantos hermanos y hermanas nuestros, y que nos dé fortaleza para seguir luchando por la eliminación de esta lacra que es la trata de personas.