Documentales Lerchundi

«TÁNGER, ESA VIEJA DAMA»

cineformEstimados amigos y amigas, el taller de cine-fórum del Centro Cultural Lerchundi de Martil os invita a echar una mirada al Marruecos reciente y al Tánger internacional. Un momento único y un tiempo irrepetible, plagado de personajes, que el tiempo quizá ha mitificado y magnificado. Proyectaremos «Tánger, esa vieja dama» de Javier Rioyo, documental que retrata la época y la presenta por parte de sus protagonistas. Una élite intelectual cuyas vidas se mostraban invisibles para gran parte de la sociedad del momento, pero cuya memoria se ha perpetuado a través de la literatura, principalmente. Un curioso retrato sociológico que de seguro propiciará un debate interesante.

Lugar: Salón de actos Centro Padre Lerchundi (antigua iglesia), en MARTIL.

 

Tánger, esa vieja dama (2001)

Cine-fórum Lerchundi.

Presentado por Damián Moragues, escritor

 

Viernes 15 de noviembre de 2013, 19’00. Salón de actos (versión en español).

Fecha: Viernes 15 de noviembre de 2013, a las 19’00.

Cineforum: al finalizar la proyección, se propiciará un debate participativo en torno a la película.

“Ven, Señor Jesús”

xxxiiiLas palabras de Miqueas, que se proclaman como profecía, las escuchamos como promesa que Dios nos hace: “Os iluminará un sol de justicia”.

Las palabras del Salmista, que repetimos como oración, las entendemos como anuncio de lo que vamos a vivir en nuestra eucaristía: “El Señor llega para regir la tierra con justicia”.

Cuanto más oscura se nos hace la noche, más intensa se nos hace la memoria de la luz, y más se vuelven nuestros ojos al oriente, de donde esperamos que amanezca para los oprimidos el sol de la justicia.

La noche duele, pero la esperanza nos guarda en su regazo: “Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”.

Feliz domingo.

Porque tú me encontrarás, ya puedo por ti perderme

estad-preparadosEn este domingo la palabra de la revelación remite al más allá de la muerte, no como ámbito de una felicidad soñada para los que mueren, sino como ámbito reservado a la acción salvadora de Dios, al ejercicio de su poder creador, experimentado por los justos como poder que da vida y hace justicia a los oprimidos.

De ese más allá, que es todo de Dios, hablan los mártires de la Antigua Alianza, cuando dicen: “El rey del universo nos resucitará para una vida eterna… Dios mismo nos resucitará”.

De ese mundo de Dios habla también Jesús cuando dice: “Que resucitan los muertos, el mismo Moisés lo indica… cuando llama al Señor «Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob». No es Dios de muertos, sino de vivos, porque para él todos están vivos”.

Esa fe que en la fidelidad de Dios profesan Jesús y los mártires, es la fuente de la libertad que necesitan para vivir con fidelidad en la hora presente su compromiso con Dios y con el hombre.

Puedes orar con los hombres de fe de todos los tiempos, diciendo: Porque creo, Señor, que “al despertar me saciaré de tu semblante”, aunque sea no más que un niño, tú me haces invencible frente al poder de los tiranos. Porque sé que tú “me enseñarás el sendero de la vida”, puedo recorrer en paz los caminos de mi noche. Porque creo, Señor, que eres Dios de vivos y no de muertos, puedo confiado seguir a Jesús de Nazaret por su camino: libre como él para amar, libre para dar la vida, libre para perderla. Porque creo, Señor, en tu fidelidad, tú me das fuerza para toda clase de palabras y de obras buenas.

Porque podemos dejar el futuro en tus manos, tú eres, Señor, la luz que ilumina el presente, un tiempo que tus hijos no necesitan para sí mismos, sino para tu Reino, para trabajar por la paz, realizar la justicia, ejercer la solidaridad.

La fe en tu fidelidad, Señor, Dios de vivos que no de muertos, nos permite ser ya de Cristo Jesús, ser como él de todos, entrar con él en la humanidad nueva de la que él es el primer nacido.

Porque tú “me saciarás de gozo en tu presencia”, porque tú; Señor, me encontrarás para que viva, ya puedo sin temor perderme por tus pobres, por tus hijos, por tu Iglesia, por tu cuerpo, por ti.

Feliz domingo.

Cine fórum Lerchundi

«LA FUENTE DE LAS MUJERES»

cineforumEstimados amigos y amigas, el taller de cine-fórum del Centro Cultural Lerchundi de Martil os invita a la primera sesión del presente curso. En esta ocasión, apostamos por la película “La fuente de las mujeres”, del director Radu Mihaileanu, un producto digno que nos apunta algunas reflexiones sobre la condición de la mujer en el mundo rural. Cine social que nos aproxima a un medio no muy lejano al lugar donde nos encontramos y que nos aporta muchos elementos para el análisis y el debate.

Lugar: Biblioteca Padre Lerchundi (antigua iglesia), en MARTIL.

Fecha: Sábado 9 de noviembre de 2013, a las 18’00.

Cineforum: al finalizar la proyección, se propiciará un debate participativo en torno a la película.

¡TE ESPERAMOS!

ENCUENTRO RETIRO (Vida Religiosa)

El sábado día  26 de Octubre, tuvimos una hermosa jornada; nos encontramos alrededor de 50 fieles, llegados desde los más diversos rincones  de la Diócesis de Tánger;  organizada por la Delegación de Vida Consagrada, para sentirnos una familia que ora, comparte y reflexiona, y así  poder crecer en nuestra vida de fe,  de amor a Cristo en esta tan singular y hermosa  Iglesia.

Fue un día hermoso, donde entre todos, seglares y consagrados,  compartimos, con sencillez y gozo, lo que tenemos y lo  somos.

María Rosa Clotet

Delegada Vida Consagrada

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CURSOS de LENGUAS y APOYO ESCOLAR

cursos13-14· Cursos de español, francés e inglés: de noviembre a junio, en horarios de mañana, tarde y noche. La duración es de 100 horas, dos días a la semana y su precio de 100 dhs al mes (el pago se efectúa por trimestres), con descuentos a familias inscritas y dobles matrículas, así como a personas con impedimentos económicos.
· Cursos especiales de español para ágrafos y estudiantes extranjeros: para mujeres beneficiarias de los programas sociales del Centro o mujeres con rentas bajas. Los estudiantes pertenecen a la asociación de estudiantes extranjeros de Tetuán (ASEET)
· Cursos de apoyo de matemáticas, física y ciencias para alumnos de liceos y bachillerato, sesiones de tarde intersemanales, descuentos a familias inscritas o de escasa renta. 
· Cursos de apoyo de español, francés e inglés: para alumnos de liceos y bachillerato, sesiones de tarde intersemanales. 
· Clases de dariya:  Dirigidos a extranjeros, clases intersemanales, en horarios de tarde, el precio es de 150 dhs. al mes.
 UN CENTRO QUE VIVE LA INTERCULTURALIDAD, QUE QUIERE ACOGER A LAS PERSONAS Y COMPARTIR VALORES HUMANOS. TE ESPERAMOS
 
Francisco Jiménez Maldonado
Centro Cultural Padre Lerchundi
Antigua iglesia
Martil  (Tetuán)
0539 97 95 53 – 0669 012 853

Tengo que alojarme en tu casa

zaqueoLo llamas “Dios mío”, “mi Rey”; lo confiesas “lento a la cólera y rico en piedad”; lo aclamas “bueno con todos, cariñoso con todas sus criaturas”. Ésa es la oración de tu fe; ésa es la fe de la que nace tu oración.

Aprendiste tu credo en las rodillas de la bondad de Dios, en los brazos de su ternura, en las páginas de la historia de la salvación. Aprendiste a Dios en la escuela de su Palabra encarnada, admirando pobrezas, escuchando parábolas, siguiendo los pasos del Reino de los cielos que venia a los hombres.

Hoy, antes de hacer tuyas las palabras del Salmista, dáselas al publicano Zaqueo, y escucha la música que tienen en sus labios: “Te ensalzaré, Dios mío, mi Rey… El Señor es clemente  misericordioso… es bueno con todos”. Escucha también la música que el Salmo tiene si quien lo canta es Cristo resucitado: “Que todas tus criatura te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles, que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas”. Escucha la música del Salmo en tu asamblea eucarística, y pregunta a tus hermanos por el motivo de su canto; verás que es el mismo para ellos y para ti, pues todos hemos oído la misma invitación: “baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa”.

Cesará tu canto, pero no cesará esa música del corazón que es la alegría por la venida de Jesús a tu casa, por la entrada de la salvación en tu vida, porque te ha encontrado el que e ama.

Feliz domingo.

Pequeños y justificados

padremeamoLos ojos se te van, Iglesia de Cristo, tras ese pecador del que Jesús dice que vuelve a casa justificado.

Te sabes identificada con él en la subida al templo, y deseas verte identificada con él en la confesión de la divina piedad, en la experiencia de la divina gracia.

Te sabes en comunión con él en la condición pecadora, y temes no hallarte representada en su humildad, temes profanar el templo de la misericordia con palabras y espíritu de fariseo, temes que de ti se diga que has vuelto a tu casa sin haber gustado la justicia del Reino de Dios.

Se te van los ojos tras ese pecador cuya presencia humilde no desentona en el lugar donde habita la santidad de Dios. El pecador no ha subido allí pese a su pecado, sino más bien a causa de su pecado; por eso se queda atrás; por eso no se atreve a levantar los ojos al cielo, por eso se golpea el pecho; por eso suplica diciendo: “¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador”. Cuanto hace y cuanto dice va proclamando los artículos esenciales de su credo: que Dios es compasión y hace justicia; que Dios es misericordia y envuelve en gracia.

Las palabras de Jesús, “el que se humilla será enaltecido”, evocan en la memoria de tu fe la figura de María, la esclava del Señor. En comunión con ella, pequeña y agraciada, el publicano y tú vais repitiendo las palabras de su canto: “Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi salvador, porque ha mirado la humillación de su esclava… Él derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes”. Dios se ha fijado en María, ¡Dios se ha fijado en el publicano y en ti!, y de todos es el canto, pues de todos es la salvación, de todos es la gracia, de todos es la justificación.

Pero tú sabes que hay algo más. Ese publicano de la parábola tiene también un misterioso parecido con Jesús de Nazaret. Del publicano se da a entender que se humilló delante de Dios, y que esa humillación atrajo sobre el pecador la compasión que pedía, la justificación que necesitaba. Del Mesías Jesús tu fe recuerda que, “siendo él de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios, al contrario, se despojó de sí mismo tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres. Y así… se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte y una muerte de cruz”. Considera, Iglesia de Cristo, el misterio de este publicano divino, cuya humillación atrae sobre ti la compasión de Dios y deja abiertos para todos los tesoros de la justificación.

La humildad es la condición de Dios en la encarnación y en la eucaristía, y empiezas a sospechar que ésa es la forma que a Dios le da el amor que él es.

En la escucha de la palabra de Dios, ha crecido tu deseo de imitar la humildad del pecador; en la comunión con Cristo Jesús, de su anonadamiento, de su pequeñez, de su humildad has hecho tu vocación, la forma de vida a la Dios te llama por la fe.

Que Cristo Jesús nos encuentre ahora y siempre entre los pequeños de la tierra.

Feliz domingo.